sábado, 4 de agosto de 2012

20.- Watch man.

Alfio Baldovín volvió de Estancia Los Flamencos con estas fotos. Respondía a un pedido del administrador del establecimiento que buscaba la inserción de este objeto en este blog.

El diálogo con Ivón no se concretó facilmente y finalmente fue intermediado por nuestro amigo fotógrafo. El aparato incluido: un controlador de desplazamientos de personal de seguridad, se incorporaba a mis experiencias personales puesto que mi padre -en tantas oportunidades- se desepeñó en tareas de ese tipo, y por ser la convinación del nombre del artefacto la de watch: reloj, y man:hombre; el adquiría la profesionalidad responsable de ser el "guachimán".

No siempre mi padre siendo guachimán tenía un dispositivo como el presente para ser controlado por sus mandantes; esto fue así cuando resultó su empleo en la Red Caminera Argentina, a fines de los sesenta, y esta empresa que tenía a su cargo la construcción del aeropuerto de Río Grande le establecía un régimen de desplazamiento nocturno que impedía el más corto pestañeo, ni que decír dormitar. A esta hora esto, a otra hora aquello. Papá recordó una escepción: el momento en que el hombre llegó a la luna; entonces el gerente -Fernández Barrios- lo invitó a pasar a su casa, y pudo ver allí el momento memorable.
Una tarjeta registrá el desarrollo horario de las tareas del "guachimán", hoy por hoy artefactos más modernos dan cuenta de los mismos propósitos:

- Se estudia el recorrido más conveniente, de manera que el sereno deba pasar por los lugares más necesarios del control.
- En cada punto se fija a la pared la caja estación, indicándole cada cuanto tiempo tiene que hacer la recorrida. De esta forma quedara registrada en el rollo de papel la hora en que ha estado en cada puesto.
- La vida útil del aparato es ilimitada.



Estos relojes de sereno o de ronda nacieron hace un siglo.Y dice un entendido: "Este tipo de relojes se usaba para poder controlar que el sereno o guardia hacían la ruta que les correspondía y a la hora que les correspondía, sin que se pudieran "escaquear". La caja es de latón, pesada, sólida, resistente y muy bien conservada. El el lateral del reloj hay dos ojos para llaves. Una de ellas es para cerrar el reloj. No dispongo de esa llave, si bien se puede hacer una copia, aunque como puede verse está abierto. El reloj se entregaba cerrado con llave al sereno o a la persona que hacía la ronda, de forma que no se pudiera manipular. La idea es sencilla pero muy efectiva. Se daba cuerda al reloj (más o menos carga 30 - 40 horas), y se insertaba un disco horario de papel que va girando en el interior, parecido al que llevan los transportistas, solo que este medía el tiempo, no la velocidad. En el otro hueco de cerradura se introducía una llave que hacía una marca en el papel al girarla. Las marcas eran distintas dependiendo de las llaves. Las llaves estaban ubicadas en distintas habitaciones o lugares por los que el vigilante o sereno debía pasar. El reloj se llevaba colgado, y se fichaba en cada uno de esos lugares, de modo que en el papel quedaba constancia de dónde y a qué hora se había estado, en función del registro que dejaba cada llave en el disco. Al término de la ronda se entregaba el disco de papel al jefe, y a casita. Y una última curiosidad. Para evitar que el interesado pudiera manipular el disco (abrir el reloj y atrasar o adelantar la hora) hay una cuchilla que corta el papel cada vez que la tapa se abre (está en la tapa) de modo que se veía si el reloj había sido abierto".

La máquina esclavista, si se me permite el término, sigue existiendo; aunque ahora presenta la apariencia del objeto que mostramos arriba de este comentario de cierre.



miércoles, 1 de agosto de 2012

19.- Armonio.



El teclado, un poco atacado por su uso, se encuentra en casa de la familia Poggi Alvarez de la ciudad de Río Grande.
Este instrumento tiene su origen en el norte del país de donde lo trajo el docente de música Ricardo Riachi -Richard- promediando los años 80. Al reemigrar en la década siguiente al norte del país el instruento realizó un periplo y hoy se resguarda en el seno de esta familia, donde cumple funciones ornamentales, recordándose como en otro tiempo los cuatro hijos lo tocaron, con la salvedad que sus pedales insulfaron el aire que lo hacía funcionar.

Cristina, la dueña de casa, colocándose al lado del armonio, nos da una idea de su tamaño y función, la similar a un piano, o una suerte de órgano, que solìa verse en las iglesias hasta la aparición de los instrumentos electrónicos.

Desde Wikipedia nos ilustramos



El armonio o harmonium (también denominado harmonio o armonium) es un instrumento de viento con teclado, en apariencia similar al organillo alemán, pero sin tubos y de mucho menor tamaño; es un instrumento musical típico de la música devocional empleada en Asia. Aunque originalmente fue concebido como un instrumento doméstico, al igual que el piano, el armonio se impuso rápidamente en muchos templos religiosos por su tamaño y precio menores que los de un órgano.




Originalmente el armonio se desarrolló en Alemania, justamente a principios del siglo XIV. Tuvo justamente un repentino cambio en su arquitectura cuando los ingleses lo llevaron a la India en donde tuvo su primer impacto sobre la población asiática. Rápidamente el armonio original sufrió ciertas modificaciones para transformarse en un organillo de piso, en donde el cantante Indio podía sentarse, bombear, digitar y cantar al mismo tiempo. La escala tonal de las varias cascadas del pedal dentro de la estructura del armonio se cambió a la escala tonal de do sostenido mayor (C#M). Rápidamente obtuvo un auge espléndido dentro de toda la India y Pakistán.




En occidente se le clasifica como un instrumento de viento de lengüeta libre. Cuenta con un teclado, que controla mediante válvulas el paso del aire por unas lengüetas metálicas que producen el sonido. La entrada de aire se produce por medio de fuelles, accionados mediante pedales por el mismo intérprete. Para conseguir un sonido uniforme el aire de los fuelles pasa a un fuelle intermedio denominado "secreto" o "reservado" que mantiene una presión constante. Sin embargo, el registro llamado "expresión" permite la entrada del aire directamente de los fuelles a las lengüetas, con lo que el intérprete puede conseguir sonidos más expresivos (forte, piano, staccato...)




En lo personal recordamos a Richard ejecutando este instrumento, en sus dìas de recién casado, y cuado era vecino de la calle Viedma.




Tambíen tenemos presente la existencias de instrumentos similares, aunque más antiguos, en la Misión Salesiana.